Espacio abierto dedicado al estudio de las historias locales de los municipios de Castro del Río (Córdoba), Porcuna (Jaén) y Motril (Granada), así como sus adyacentes. Recomiendo la utilización del apartado de comentarios para aportaciones, consideraciones, críticas o rectificaciones. De igual manera, está disponible para quienes deseen colaborar con la publicación de artículos o aportando documentos, sobre cualquier tema de carácter histórico relacionado con dichas poblaciones.

03 julio 2012

Mi Nereida. Los reos de Porcuna (nuevas noticias históricas).

Ciudadanos de Porcuna (1914-1915)
     Prescindo de prolegómenos. Para quienes desconozcan lo ocurrido el 28 de Julio de 1913 en el paraje conocido como Cañada o Pozo de la Teja, en las proximidades del cortijo de San Pantaleón, término municipal de Porcuna (Jaén), propiedad del labrador Don Ángel Ruiz de Adana Torres, sobre el fatal y negro encuentro entre la pareja de la guardia civil y unos cazadores-jornaleros furtivos, conocidos como Hermanos Nereos, les recomiendo un paseo previo por una serie de entradas publicadas en este mismo especio sobre tan luctuoso-enojoso suceso y su consiguiente proceso (Crimen y/o castigo: el caso de los “Hermanos Nereos”).
    
     Para poder volver a ocuparme del caso con conocimiento de causa, he tenido que emprender un dificultoso y laborioso discurrir (letra muy emborronada) por entre las páginas del voluminoso sumario que les instruyo en su día la Jurisdicción Militar. Lo había desechado en un principio, por apreciar a las claras, al menos esa es mi impresión, de que estábamos ante testimonios prácticamente realizados al dictado de unos intereses determinados. Imagínense la tesitura de humildes jornaleros citados para testificar ante un juez togado militar. Tendrían que cagarse lo pobres las patas abajo. ¡Como para tomar partido por quienes desde un principio fueron etiquetados como criminales! Pero dejemos de momento aparcados esos testimonios, para centrarnos en lo ocurrido en los días inmediatamente siguientes a aquel aciago encuentro.
    
     Estando aun los Nereos en busca y captura, una de las primeras disposiciones del Teniente Juez Instructor y Secretario, desplazados al efecto, fue la de interceptar la correspondencia de la familia, con vistas a procurar dar con su paradero y ponerlos a disposición de la justicia. En sumario incluye un telegrama cifrado dirigido por el Jefe de Línea de la Guardia Civil de Priego de Córdoba al Teniente Juez Instructor del caso, con fecha del día primero de agosto, en el que se menciona la interceptación de una serie de cartas.


     La primera de ellas, es la dirigida por Nereo Ramírez Ortega, padre de los presuntos criminales, a un hermano de padre residente en la aldea de Castil de Campos, llamado Andrés Ramírez Escobar. Antes de entrar en otros detalles, permítanme que les transcriba el contenido de las letras de ese padre desconcertado y asustado. A mi juicio resulta estremecedora. He corregido las numerosas faltas de ortografía y ligeramente la sintaxis para hacerla más digerible y entendible. Tiene fecha de 30 de Julio, justo dos días después del trágico suceso y he considerado conveniente hasta ponerle título (una ligera licencia literaria).


Carta de un padre desesperado

     Querido hermano con lágrimas te pongo estas líneas no con tinta. Después de haber estado segando esta estación mis dos queridos hijos, Justo entró de guarda particular con uno de la familia el día 2 del presente hasta el tiempo en que te cruzo estas letras. Llegó el día 25 y quiso holgar y para relevarle se fue Nereo (Antonio). Una vez en el sitio acordaron quedarse juntos y echar un día de caza. Tenían licencia de caza, pero estaban en el periodo de la veda de lo que siempre se tapaban. Teniendo que hacer su recorrido por los terrenos que estaban a su cargo hubieron de llegar a una era a beber agua y estando allí vieron salir dos personas de una cortijada que hay por encima con una caballería que se dirigía hacia ellos. Un muchacho que había en la era les advirtió de que se trataba de la pareja, aunque iban vestidos de paisano. Partieron Justo y Nereo y se fueron en dirección contraria, pero la pareja que llevaba una caballería prestada les dieron una contra marcha y le salieron al encuentro. Nadie sabe lo que pudo pasar. Lo fijo y triste es que la pareja resultaron ambos muertos, era un sargento y un guardia, el guardia en el acto y el sargento duró horas.

     Las licencias y zurrones de caza con algunas piezas, reloj y unas perrillas de Nereo también se encontraron allí. Era un rastrojo y salió ardiendo. No se sabe si sería haciéndoles suplica, hay tienen ustedes cédulas, licencia y caza. Si se yo que como no les pegasen mis hijos no disparaban. Se fugaron, no se mas hermano mío. Me escribes y a la vez le escribes a Don Niceto con estos detalles, le voy también a escribir. Que lastima, que buenos, que queridos de sus amigos, sin vicio ni de tabaco. Hay que sentirlo por ellos, pero también por su madre, su hermana y yo que desgraciados vivíamos de ellos y con ellos éramos felices. Sin ellos búscame una colocación hermano.
     La pobre de mi hija María que está aquí, que ha venido a restablecerse de una enfermedad, no sabe nada a estas horas, se le tapa el asunto. Pero Ay Hermano les tenía este sargento muchas ganas y les ha tenido guardado el caso. Yo no sé lo que puede pasar para que se haya labrado la ruina de todos. Se despide tu hermano con el corazón pensado en Dios.
   Tu hermano Nereo.

    El hermano de Nereo ( padre) debía de ser una persona popular y conocida por aquellos lugares. Su ascendencia con Don Niceto imagino que obedecería a esos lazos clientelares que sabían tejer a la perfección estos políticos del caciquismo, especialmente en las pequeñas villas donde resultaba relativamente fácil vaciar el censo en favor de sus candidatos. Se dedicaba profesionalmente a la práctica del curanderismo, lo que con el tiempo le acarrearía algún que otro problema con la justicia. Se le conocía por el remoquete de Joseico:
La Voz de Córdoba (21 de diciembre de 1928)
     Forzosamente también habría que contemplar esas noticias de la tradición oral sobre que la madre de los Nereos pudiera haber sido nodriza o ama de leche de don Niceto, o que pudieran ser, incluso, hermanastros del mismo. Estos extremos los veo más bien como surgidos de la imaginación popular después de aquel sonado proceso.
    De cualquier manera lo que sí parece claro es el deseo de Nereo padre de hacerle llegar a Don Niceto sus angustias y preocupaciones, por si éste estimaba a bien echarle una mano. Aunque más que por su defensa jurídica, su rogativa parece ir encaminada en el sentido de una recomendación o empleo que permitiera subsistir a su familia, desde aquel momento privada de los imprescindibles jornales sustentadores de sus hijos.
Anverso
Reverso
     Retomemos la carta, ya que su continente nos depara una sorpresa: el sobre, como se puede apreciar, pertenece y lleva el correspondiente membrete del Circulo Unión Liberal de Porcuna. ¿Cómo interpretamos esto? Se presta a pensar que se le pudiera haberle prestado ayuda desde este círculo político para redactar esa carta de su puño y letra, prestándosele el sobre, por ser simpatizante o colaborador, o por estar sensibilizados con su estado anímico. Dejemos ese presumible apoyo de las fuerzas liberales locales pospuesto para otro momento.
     Con esa misma fecha del 30, tal como se anuncia en la misiva remitida a su hermano, debió escribir esa otra carta a Don Niceto, que no pudo ser interceptada, pudiendo transmitir sus inquietudes a tan honorable prócer, como lo demuestra la devolución de éste, que conocemos pues ésta si resultaría capturada. Lleva el  sello del servicio postal del Congreso de los Diputados en el sobre y el membrete del por entonces Diputado a Cortes por la Carolina en el  pliego de papel utilizado.



     Aunque anexo la carta, insertada en formato imagen, allá va su trascripción para facilitar su lectura:



Sr. Don Nereo Ramírez


     Mí estimado amigo: lamento muy de veras las desgracias que le afligen y me indica en su carta, cuya triste impresión comprendo perfectamente. Quisiera sinceramente que estuviera en mis manos darle la colocación de que habla, para lo cual la edad de V. y las condiciones en que actualmente se nombran los empleados son grandes dificultades.
     Como creo que pronto iré por Priego… (Se corta el texto)
     Deseando que sus sufrimientos tengan el ahorro posible, queda de V. su afectuoso amigo SSQBM.


     Poca, por no decir ninguna, parece ser la predisposición del diputado Niceto Alcalá Zamora y Torres, de pringarse en este espinoso asunto. Es más, cuando abordemos el tema sobre los abogados que llevaron el caso de los reos de Porcuna podremos constatar cómo, en un principio, su nombre no aparece por ningún sitio, tal como se viene considerando.



     Ya puestos a destapar el tarro de la hipocresía, que iremos derramando poco a poco, conforme vaya localizando comportamientos merecedores de esa adscripción, les dejo, de momento, con el testimonio aportado por el “gran cacique liberal”, varias veces alcalde de Porcuna, durante los años finales del XIX y primeras décadas del XX: Don Luis Aguilera y Coca “El Chato”.

Declaración del testigo Don Luis Aguilera y Coca


(Porcuna 3 de Agosto de 1913)
    Que se llama Don Luis Aguilera y Coca, de setenta y seis años de edad, casado, propietario, declara que conoce a los hermanos Justo y Antonio Nereo Ramírez Muñoz, así como también conoció al sargento y guardia asesinados, que no tiene con ninguno de ellos parentesco, amistad o enemistad y que tampoco tiene interés directo ni indirecto en esta causa.
     Preguntado, manifestó que en alguna ocasión se quejó al sargento José Martínez Montilla, de que los hermanos Nereos le habían pisoteado un trigo y arroyado su propiedad sin su consentimiento. Dijo: que efectivamente hacia poco tiempo, antes del hecho de autos que el dicente manifestó al Sargento la invasión de los referidos individuos en sus propiedades causando daños tanto en ella como en la caza de la perdiz que al quitarles la sombra en las horas de calor durante la caza se ahogaron la mayor parte de ellas así como también en su persecución atropellaron los sembrados dando lugar con ello a la queja que produjo siendo de dominio público lo que hacían en otras propiedades de este término entre las que puede citar la del vecino de finca don Damián Parra Giménez.


     Sin comentarios. Juzguen ustedes.
     Tanto profanos, como conocedores e investigadores del caso (somos varios los subidos en esta barca de rumbo incierto e intrigante), tienen a su completa disposición para aclaraciones, apropiaciones indebidas, dudas, críticas o rectificaciones la sección de comentarios.

     El sumario instruido a los Hermanos Nereos lo he podido conseguir gracias a la inestimable colaboración del amigo y compañero, Arturo del Pino Ruiz, homónimo (nombre y primer apellido) del famoso y célebre “Arturé”, que me hizo el favor de personarse para fotografiarlo en el Archivo del Tribunal Militar Togado Territorial Segundo de Sevilla. Gracias compañero.


15 comentarios:

  1. Alberto lo tuye es crónico.Pecas de prepotente y arrogante.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ostras, acabo de salir del obligado letargo veraniego de la siesta y el antivirus me alerta de la irrupción de un CANI (Comentarista Anónimo No Identificado) que no va muy descaminado a la hora de asociar adjetivos con mi personalidad. Soy tan crónico como cronista. Las aproximadamente 240 entradas que engrosan el cotarro éste no dejan de ser crónicas sobre la historia de las diferentes localidades que son objeto de estudio. Lo de la prepotencia y arrogancia, pues depende, cabe la posibilidad y hasta pudiera darse el caso. Me tendré que someter a sesiones de psicoanálisis para atajar y poner remedio a posibles anomalías espirituales. Aunque tal vez no sean las patologías adecuadas esas que me adjudica, yo diría que se trata más bien de eventuales subidas de testosterona que me ayudan considerablemente a librar mis batallas contra la hipocresía. Permítame que utilice la misma fórmula de despedida que Don Niceto: Deseando que sus sufrimientos tengan el ahorro posible, queda de V. su afectuoso amigo SSQBSM.

      Eliminar
  2. Antonio Recuerda Burgos4 de julio de 2012, 2:08

    Hola Alberto:
    No puedo mostrarme de acuerdo con la interpretación que das a la carta de Alcalá Zamora, pues es imposible que esta carta sea respuesta a otra escrita tras el crimen, ya que éste fue el día 28 y hasta el día 30 Antonio Nereo, padre, no escribe a su hermanastro, Andrés, comunicándoles los hechos y pidiéndole que escriba a don Niceto, al que él piensa escribirle también. La carta de don Niceto lleva fecha del día 31, por lo que es imposible que pudiera recibir con anterioridad la que Antonio Nero pudiera haberle escrito, que no Andrés, pues a él nunca llego la de su hermanastro.
    Creo que la interpretación de la Carta de don Niceto debe ser la siguiente: Justo y Antonio tenían una hermana que por enfermedad había tenido que ir a Madrid en busca de curación, creo que la desgracia a que se refiere Alcalá Zamora es ésta y seguramente con el fin de poder estar junto a su hija en Madrid es lo que mueve a Antonio Nereo, padre, a pedir la colocación de que se habla, todo naturalmente con anterioridad a que ocurrieran los fatídicos hechos.
    Esta hermana murió poco después ignorando dónde, pues tanto en el Registro civil como en el Libro de Defunciones parroquial de Porcuna no aparece la defunción.
    Por otra parte la línea que te falta de la carta de Alcalá Zamora es la siguiente: “y allí hablaré con la familia”.
    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Con conocimientyo de causa y mejor vista que un servidor, aunque tus argumentos no creo que terminen de desmontar mi interpretación. Quieres decir que Acala Zamora cuando remite aquella carta con matasellos del 31 de Julio no conocería ya las circunstancias del "crimen" a través de la prensa y amigos políticos de la zona. Lo dudo. Habrá que seguir escudriñando en ese sumario que ambos tenemos en nuestras manos, aunque conseguido por diferente vía. Tu copia quizá tenga mejor calidad fotogáfica que la mía. Seguiremos contrastando pareceres, aunque ya sabes que el caso es espinoso y se presta a la suspicacia. No debemos dejarnos llevar ciegamente por los testimonios del sumario.

      Eliminar
    2. Antonio, sobre la escala de valores de Don Luis "El Chato", para quien los perdigones tenían mas valor que la vida de dos hombres, supongo que no tendrás nada que objetar al respecto.

      Eliminar
    3. Antonio Recuerda Burgos4 de julio de 2012, 10:30

      Alberto, en primer lugar es seguro que a pesar de haber transcurrido solamente tres días Alcalá Zamora conocería los hechos, quizá de forma muy parcial, pero lo que yo mantengo es que al carta nada tiene que ver con esos hechos y que es contestación a otra anterior a los sucesos, no creo que Antonio Nereo se pusiera a escribirle y a pedirle una colocación ni el mismo día 28, ni el 29, ni el 30, pues bastante tendría el hombre con lo ocurrido, además si lo hubiere hecho no había tiempo material para que llegase a manos de don Niceto en tan corto espacio de tiempo ni a que éste la hubiese contestado el día 31.
      Con respecto a don Luis Aguilera y Coca lamento decirte que te precipitas al prejuzgarle, pues su declaración es inmediata a los hechos, del día 3 de agosto, cuando todavía los Nereo se encontraban huidos, ya que no fueron detenidos hasta el día siguiente 4 de agosto a las doce de la mañana. Lo que hace Aguilera es ratificar una denuncia que había puesto con anterioridad por destrucción de los sembrados al practicar la caza furtiva y la referencia a las predices es algo que ahora mismo harían también, no solamente los cazadores sino cualquier ecologista. No me cabe en la cabeza que un hombre del talante liberal como era Aguilera y Coca pudiera tener las ideas que manifiestas y esa escala de valores pues seguro que en el momento de la declaración no se planteaba lo que pudiera ocurrirles a los Nereo, limitándose solamente como he dicho a ratificar su anterior denuncia, motivo por el cual sería llamado a declarar.
      Además en esa misma ratificación de la denuncia, por haberle atropellado los sembrados, se manifiesta el que después sería también alcalde de Porcuna José Santiago Quero, en su declaración del 6 de agosto que además había amenazado a la pareja con llevar el caso al teniente coronel jefe de la comandancia de la Guardia Civil de Jaén que no era otro sino nuestro paisano Juan Ollero Morente.
      No olvidemos que los hechos se producen en época de veda, en fechas en que se mantenían en píe las mieses, y como reconoce en su primera declaración Antonio Nereo había sido denunciado alguna que otra vez por infringir la ley de caza.
      Por tanto todas estas declaraciones son muy anteriores al comienzo del proceso y más a su condena a muerte. Creo que en ese momento ninguno de los declarantes podía preveer comos e desarrollarían los acontecimientos.

      Eliminar
    4. Se nota que estas volcado en cuerpo y alma en el tema. Debes llevar muy avanzada esa publicación para conmemorar el centenario de los hechos, que ya en cierta ocasión, al poco de abordar yo el tema, advirtiéndome tal vez por intrusismo (así lo entendí), me hiciste saber que estabas embarcado. Aún no teníamos ninguno de los dos el famoso sumario. Creo que fue tras una reedición de mis entradas en la que insertaba el croquis elaborado sobre el terreno, cuando te pusiste las pilas, quizá temiendo que pudiera adelantarme. La aridez del tema y mi culillo de mal asiento (no tengo constancia para permanecer mucho tiempo sentado en la misma silla) me hicieron descartar desde un principio esa posibilidad. En lo de la carta de don Niceto posiblemente lleves razón, y creo tu análisis y argumentación más pausada y reflexiva que la mía. Lo raro es que no acompañe esa misiva de unas palabras de aliento por los recientes acontecimientos que debería conocer. Esto me induce a pensar en la figura de un secretario encargado de despachar impersonalmente su numerosa correspondencia, que don Niceto se limitaría prácticamente a firmar. Es algo común entre la clase política. Ahora se ha puesto de moda eso del twinter y el facebook de los políticos, por aquello de demostrar cercanía con los administrados, cuando lo más probable es que los gestione y mantenga un asalariado de confianza.
      Sobre el talante liberal de Don Luis Aguilera y Coca, permíteme que discrepe. Ese liberalismo era claramente de corte caciquil y populista, si no que se lo pregunten a aquellos primeros obreros asociados de Paz y Libertad, que por lo visto lo tenían en gran estima, por todas las trabas que les puso a la hora de ejercer ese derecho a la asociación, recogido en unas leyes de Juan Palomo, emanadas de aquellos parlamentos del sistema de la Restauración, y que sabían a la perfección y con total impunidad voltear y aplicarle dobles lecturas con arreglo a sus intereses particulares. Fue precisamente el encargado de traer a aquellas monjitas que montaron establecimiento de enseñanza en la calle Albercón, con vistas a contrarrestar la pedagogía obrera recibida en la cada vez más exitosa Escuela del Centro Obrero. A ese mismo propósito de frenar esas propagandas disolventes y poder encauzar el rebaño y feligresía por “el buen camino” atribuyo yo la famosa misión jesuítica del padre Tarín de octubre del año 1904. Claro que para salvar un poco las apariencias, supo utilizar “su fluida y arrebatadora oratoria” para echarle una regañina al señoritismo de casino que se daba cita en el Centro Liberal, al parecer reacio a asistir a sus citas.
      El delito que se les imputa a los Hermanos Nereos es el de “insulto a fuerza armada y muerte del sargento Martínez y guardia Vivancos”. No creo que don Luis fuera ajeno a las consecuencias que pudiera acarrearle esa imputación. La ratificación de esa denuncia, aunque fuera en los días inmediatos al suceso, no la veo demasiado favorable para la causa defensiva de estos desgraciados hombres, que con el tiempo terminarían arrogándose los liberales y a cuyo carro también tuvieron que subirse obligadamente los conservadores.
      Corto y cambio.

      Eliminar
    5. Antonio Recuerda Burgos4 de julio de 2012, 12:52

      Todavía Alberto no he comenzado la redacción sobre los Nereo, aunque le he dado muchos repasos a las fuentes, aún estoy recopilando nueva información. El tener que ocuparme de otras publicaciones en curso me lo ha impedido, además yo creo que te informé que en mis proyectos no estaba el ocuparme de ello por lo menos ahsta el 2013. No recuerdo cuando reelaboraste e incluiste el croquis, pero ello, ya que tú lo citas no yo, no me puso las pilas, yo estuve en Sevilla, según compruebo en mis fotografías, el día 8 de marzo jueves, por cierto allí tuve la ocasión de saludar a nuestro común amigo Arturo del Pino con quien comenté el motivo de mi visita.

      Eliminar
    6. Antonio, dejemos el asunto aparcado si te parece bien. Quiero elaborar otra entrada sobre las defensas cuando tenga tiempo y ganas. Como supongo que ese tema ya lo tendrás también desgranado podías publicarlo en tu blog, y que las apostillas fueran mías. Cualquier intercambio de pareceres es siempre enriquecedor. De cualquier forma creo ya le estamos haciendo un gran favor publicitario a la novela de Luis Emilio, registrada en propiedad intelectual, de la que por lo visto eres prologuista. A ver si tuviera la posibilidad de asistir el día de la presentación y departimos un rato sobre el asunto. La honorabilidad y bonhomía de don Niceto y los prohombres (caciques) del liberalismo local, don Luis Aguilera y Coca y su sucesor don Emilio Sebastián, o el propio Diputado por el distrito de Martos, Don Virgilio Anguita Sánchez, permíteme que siga cuestionándola, mientras no se demuestre lo contrario.

      Eliminar
    7. Antonio Recuerda Burgos4 de julio de 2012, 13:52

      Hoal Alberto estoy de acuerdo en dejar aparcado el tema,pero quiero hacerte un comentario con respecto a la novela de Luis Emilio y es que yo la desconozco, él me pidió que le escribiera el prólogo a lo que respondí que todavía no he comenzado el estudio definitivo de las fuentes y que no tengo intención de ponerme a escribir sobre ello hasta entrado el año 2013, entonces me pidió permiso para utilizar como prólogo el artículo que escribí hace años, que está publicado en mi blog, que conoces y que citas en tu trabajo sobre La tradición oral de los Nereo, a lo que accedí y ese es el prólogo.

      Eliminar
    8. Entonces una ligereza por parte de Luis Emilio de anunciar como prólogo lo que según me cuentas es un anexo. Yo tambien fui invitado, pero rechazé la invitación, a sabiendas de lo peligroso que resulta mezclar historia con ficción. El croquis que anuncia como anexo, si supongo que se lo habrás proporcionado tu, ya que el que yo colgué en mi entrada tenía una resolución pésima. Las lápidas de los guardias me las proporcionaron todoslosnombres, que to hay que decirlo.

      Eliminar
  3. Alberto ¿En esta procesión quien lleva la cruz de guia?

    Cachondo castreño.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cachando tienes unas cosas que colgando parecen bolsas. Me has caído simpático y voy a intentar satisfacer tu curiosidad utilizando terminología procesional. En este cortejo, de momento, que yo sepa, deberíamos salir tres personas. Vendría a ser como la procesión del Corpus, donde cada cofradía o hermandad lleva sus propias insignias o estandartes. Aunque, desde mi punto de vista, debería incorporarse una cuarta, con sobrados y demostrados conocimientos en materia jurídica. De manera que si alguien con interés y la formación adecuada, dispuesto de entrada en empaparse el Código de Justicia Militar vigente durante aquellos, se mostrase dispuesto a abordar el tema desde esta perspectiva, solamente tiene que hacérmelo saber, que a renglón seguido pondría en sus manos ese ya referido voluminoso, borroso y aburrido sumario.

      Eliminar
  4. Aclaraciones y suspicacias cogidas de la mano: La reedición de la entrada de los Nereos en la que se incluye como novedoso croquis, lápida y tercera parte de la sentencia (que me había dejado atrás), según mis archivos de facebook, donde la publicité, fue realizada el 8 de febrero del año en curso. Al día siguiente, tras un primer correo de Luis Emilio en el que alagaba mis trabajos e invitaba a participar en los premios de investigación Obulco, recién convocados, me llegó su demanda sobre una copia del croquis con mejor resolución, que desatendí, pues le hice saber la posibilidad de retomar el tema con vistas a una publicación en papel. Que sea Luis Emilio pues quien nos explique cómo ha conseguido ese croquis insertado en su reciente publicación.

    ResponderEliminar